Santoña es un pueblo costero donde conviven sus habitantes con los turistas que, cada día, recibe esta población marinera.
Es un verdadero placer pasear pos sus calles, descubrir sus plazas y, por supuesto, degustar unos deliciosos churros.
La oferta gastronómica es muy grande, así como la oferta cultural y festiva.
El paseo al borde del mar es lugar de encuentros, de idas y venidas, de observar al otro lado Laredo o el barco que cruza las dos orillas.
A Andoni y a mi nos gusta mucho Santoña y, por eso, lo visitamos con frecuencia.
La Virgen del Puerto se encuentra situada en un lugar privilegiado.
FOTOS: ANDONI RENTERIA